1. Analízate a ti mismo constructivamente.
La actitud se construye a base de personalidad y de los eventos que ocurren y han transpirados a lo largo de la vida. Antes de decidir pasos para cambiar la actitud, debéis analizar tus motivos, pensamientos y acciones.
Es de suma importancia hacer una auto-examinación. Siempre debes ser honesto con contigo mismo e identifica al menos cinco de las fortalezas de tu personaje y cinco áreas que necesitan mejorar.
Aquí hay algunas preguntas iniciales:
- ¿Cuál es el mejor aspecto de mí?
- ¿Cuál es el aspecto en de mi persona del cual puedo mejorar?
- ¿Qué cambios de actitud me harían sentirme mejor conmigo mismo?